No debes creer todo lo que has oído o visto en las
películas sobre los americanos. Inclusive varias de las cosas pueden ser ciertas
para individuos específicos mas no para grandes grupos poblacionales. Por
ejemplo: los americanos tienden a ser “ruidosos” en algunos eventos, sobretodo
de índole deportivo, Algunas personas pueden ser intolerantes y xenofóbicas,
pero la mayoría son cordiales y hospitalarias. Recuerda que las películas y la
televisión exageran para generar emoción e interés, y lo que se ve muchas veces
distorsiona la realidad.
Los americanos tienden a ser más informales que
las personas de otros países. Es común que vistan de una manera informal para
ir a la escuela y saluden a su profesor por su primer nombre. Si tu eres cortes y educado, y vistes un poco
más formal que tus amigos americanos siempre serás bien recibido.
Hablemos sobre el trato que tienen los americanos
,cuando están conversando tienden a dejar una cierta distancia entre ellas.
Cada persona cuenta con un espacio personal delimitado por una línea imaginaria
que determina el espacio que no deberá ser invadido por otras personas. Si
alguien pasa este límite, los americanos se sienten incómodos y buscan la forma
de alejarse para aumentar la distancia entre ellos (la excepción mas frecuente
es entre miembros de la familia y seres amados).
Estas personas evitan cualquier contacto físico
cuando se esta conversando, esto podría crear cierta incomodidad. Tocarse
implica demasiada intimidad en el caso de conocidos o relaciones casuales. No
pongas tu brazo en el hombro de la otra persona o toques su cara. Un apretón de
manos al saludar o despedirse es aceptable pero no sujetes la mano por mucho
tiempo.
Usan las palabras como herramientas para expresar
sus opiniones y lograr sus metas. Hablar para uno mismo y tratar de convencer a
otro de adoptar su punto de vista no es mal visto, de hecho en muchos casos eso
es lo normal.
Los americanos frecuentemente organizan reuniones
sociales con poca anticipación, no te sorprendas si te invitan a la casa de
alguien, al cine o a un evento deportivo sin previo aviso. Si te conviene
acepta la invitación. Pero si estas ocupado, no te sienta comprometido a
aceptar la invitación: menciona que no te es posible, da una breve explicación
y sugiera otro momento mas adecuado para ti, el anfitrión no se sentirá
ofendido.